Las marcas de moda tienen las herramientas para triunfar y desempeñar un papel crucial en la transición hacia una industria de la moda circular. Aunque la circularidad exige que las marcas se replanteen su forma de hacer negocios, muchos de los ingredientes de las prácticas verdaderamente circulares ya existen. Por ejemplo, el reciclaje: según el informe Textile Exchange Materials, el algodón y el poliéster siguen siendo los tipos de fibra más utilizados. Esto se refleja en el número de tecnologías existentes y en desarrollo que se centran en el reciclaje del algodón y el poliéster. A medida que las marcas conozcan mejor el panorama del reciclaje textil, esto influirá en el proceso de diseño y ayudará a aumentar el uso de materiales reciclados. Se trata de un paso crucial en la creación de un modelo circular más accesible y rentable para la industria de la moda
Los servicios de reparación son otra vía prometedora hacia la circularidad
Varias marcas ya están adoptando servicios de reparación. Por ejemplo, la empresa de comercio electrónico de lujo Farfetch ha creado un programa de "venta, donación y reparación" que permite a los clientes enviar ropa y accesorios usados a cambio de crédito en la tienda.
Aunque muchas marcas de moda y estilo de vida quieren adoptar prácticas más sostenibles, puede resultar difícil saber por dónde empezar. Sin embargo, cada vez hay más ayuda disponible. En Bleckmann, por ejemplo, hemos desarrollado RESCUE, una solución racionalizada para ayudar a las marcas a restaurar las devoluciones dañadas hasta dejarlas como nuevas, lo que permite revenderlas y evitar residuos. Esto puede contribuir al cumplimiento de la legislación vigente, como el ESPR, además de mitigar las pérdidas económicas asociadas a la eliminación de devoluciones dañadas.
Diseñado como un primer paso hacia las prácticas empresariales circulares, RESCUE puede integrarse fácilmente en el proceso de devoluciones de una marca de moda. Puede añadirse a los servicios logísticos existentes que Bleckmann proporciona a una marca o configurarse como un servicio independiente.
Cuando pusimos en marcha el servicio RESCUE con el minorista online Otrium, reparamos el 50% de sus productos dañados. En siete semanas, ¡el 70% de los productos reparados se vendieron de nuevo!
La circularidad en la moda ha llegado para quedarse, y es probable que las marcas que apliquen prácticas circulares ahora tengan una ventaja competitiva que sólo puede crecer en los próximos años. Al adoptar diseños más duraderos e incorporar capacidades de reciclaje y renovación en sus operaciones, las marcas pueden "matar dos pájaros de un tiro":
- Responder a la demanda de los consumidores de productos más duraderos y sostenibles (la tendencia "comprar menos, comprar mejor"),
- Facilitar el cumplimiento de la normativa actual y futura.
Fundamentalmente, las marcas de moda no están solas
La circularidad debe verse a través de la lente del "pensamiento ecosistémico"; está impulsada por la colaboración entre los clientes, los legisladores y las propias marcas. Después de todo, no puede haber circularidad si las empresas no invierten en proporcionarla; las soluciones circulares como los servicios de reparación no pueden tener éxito si los clientes no los utilizan; los legisladores no pueden desarrollar normativas eficaces sin basarse en historias de éxito; y las marcas de moda no pueden adoptar la reciclabilidad si los gobiernos y los socios de la cadena de suministro no invierten en aumentar la capacidad de reciclaje.
Figura 1: El pensamiento ecosistémico se basa en la participación de todas las partes interesadas
Las marcas de moda pueden desempeñar un papel protagonista en el ecosistema de la circularidad
Las marcas que implantan nuevas prácticas, tecnologías y servicios circulares permiten obtener varios beneficios importantes: pueden influir sutilmente en el comportamiento de los clientes, proporcionar casos de aplicación para que los legisladores y los homólogos aprendan de ellos y animar a los socios de la cadena de suministro a invertir en circularidad junto a ellas. Al ejercer su influencia a través de sus relaciones con estas partes interesadas, las marcas contribuyen a crear circuitos de retroalimentación positiva que facilitan una mayor implantación y ampliación de los modelos empresariales circulares.
En Bleckmann, creemos que gran parte de los conocimientos necesarios para apoyar la transición a una economía circular de la moda ya existen; de hecho, es posible que este cambio ya haya comenzado. Lo importante es que el impulso no procede de una sola fuente. Las marcas de moda están animando a sus clientes a adoptar prácticas más responsables con el medio ambiente, y los clientes están presionando a los legisladores y a las empresas para que adopten políticas más sostenibles. Los legisladores están impulsando el cambio mediante la reforma, pero se les puede apoyar en esta tarea mediante el diálogo con las empresas. Y los socios de la cadena de suministro como Bleckmann también tienen un papel que desempeñar. Mediante este "enfoque ecosistémico" del cumplimiento de la normativa, la industria de la moda debe analizar sus prácticas en toda la cadena de valor, desde el abastecimiento de materias primas hasta la gestión de residuos y la elaboración de informes. Juntos, podemos hacer realidad la circularidad.